EL CANIJO DE JEREZ
En 2020 un astrónomo aficionado miró por su telescopio cósmico y descubrió en el cielo un resplandor de una figura oscilante y magnética. Aquel artesano de canciones decidió bautizar al nuevo fenómeno astronómico como “Constelaciones de humo”. Agarró su guitarra de alambre y transformó en melodías aquella esencia cósmica para enseñársela al mundo y devolverla de nuevo a su lugar de origen en el universo, pero algo se lo impidió. A la hora bruja una fuerza desconocida y maligna llamada “pandemia” sacudió los cimientos de la existencia y cortó la comunicación entre los seres humanos. Con el tiempo, los terrícolas vencieron a aquel maldito virus y volvieron a experimentar la mágica sensación de respirar y saltar en los conciertos entre besos de flores. El resplandor magnético de aquel andaluz de Jerez de la Frontera dejó a casi todos con el pelo de fuego y las manos verdes, y nunca más volvieron a tener miedo. Cuando aquel astrónomo completó sus enseñanzas con su público quiso cerrar la puerta cósmica para siempre y pasar al siguiente nivel de búsqueda. Pero antes de partir hacia su nuevo destino se dirigió a la muchedumbre y dijo: “Yo solo puedo mostraros la puerta, vosotros tendréis que atravesarla para cerrarla por última vez”. El vocalista, guitarrista y compositor de LOS DELINQÜENTES, sin “ex” por delante, porque si uno es garrapatero lo es para toda la vida, comienza en Garaje Beat Club la recta final de su gira “Constelaciones de humo”.